La alfabetización y la accesibilidad son dos elementos que deben regir la actividad periodística. La primera, para lograr que la gente consuma información veraz, y la segunda, para que cualquiera pueda acceder a esa información sin distinción de sus circunstancias particulares.
Alfabetización mediática
La fundación Luca de Tena en su informe Alfabetización Mediática la define del siguiente modo:
La alfabetización mediática es una conceptualización ampliada de la alfabetización. Si ésta es, de manera muy esquemática, la adquisición de un conjunto de competencias de lectura, escritura y cálculo, la alfabetización mediática es la adquisición de competencias centradas en los medios y las redes sociales con las que se interactúa a diario, dada la importancia que han adquirido en los últimos años y el papel que juegan en el día a día de las personas en el mundo actual.
Desde que el público de los medios se ha convertido en prosumidor, se habla de alfabetización transmedia. El investigador Carlos A. Scolari afirma que la web se está convirtiendo en uno de los principales entornos donde los sujetos aprenden, se informan y entretienen.
Según la FAPE, la alfabetización mediática es absolutamente necesaria para luchar contra la desinformación, debido a que es una de las principales amenazas para la democracia.
Esther Wojcicki, periodista, profesora y vicepresidente del consejo consultivo de Creative Commons, destaca la importancia de la alfabetización, ya que considera que ayuda a prosperar. Define la alfabetización mediática como la capacidad de consumir la información de manera inteligente.
Hoy en día, con la facilidad de publicación debemos poner en cuarentena toda la información que recibimos, hasta que comprobemos su veracidad.
Accesibilidad
Según la Ley General de los derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social (LGD), la accesibilidad universal es la condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos y servicios, así como los objetos, instrumentos, herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad y comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.
La accesibilidad web no debe afectar solo a las personas con discapacidad. También debe facilitar el uso a las personas que utilizan diferentes dispositivos, a los distintos grupos de edad o a aquellas que presenten limitaciones por su ubicación o conexión a Internet.
Web Accessibility Initiative recoge las recomendaciones para hacer el espacio digital más accesible para todas las personas. Puedes leer sus últimas entradas aquí.